miércoles, 16 de mayo de 2012

los 5 pilares del Islam

Los 5 pilares de Islam son :

1º profesión de fé (shahada)
2º oracón (el salat)
3º limosna (zakat)
4º ayuno (sawn)
5º peregrinacin a la meca (al-hach)


profesión de fé (shahada)


"No hay más dios que Alá y Mahoma es su profeta". Otra fórmula es: "Atestiguo que no hay divinidad fuera de Dios y que Mahoma es el profeta enviado de Dios".
Estas fórmulas pone de relieve el carácter monoteísta de la fe islámica, que rechaza el politeísmo y la idolatría y al mismo tiempo proclama a Mahoma como el profeta que transmite el mensaje o revelación de Dios a la humanidad.
Esta profesión de fe es como una jaculatoria (oración breve dirigida al cielo) que el musulmán repite casi instintivamente en las circunstancias más críticas de la vida: se la susurran al oído cuando nace, la ve escrita en los dinteles de la puertas, pintada en las paredes o bordada en los brocados y vestidos, la pronuncia cuando se ve en peligro y a la hora de la muerte.

Pronunciada sinceramente ante dos testigos basta para ser considerado musulman.


Oración (salat)
Rezar cinco veces al día en dirección a La Meca.
La unicidad de Dios se expresa ritualmente en la oración comunitaria, que todos los musulmanes deben observar, rezando en la misma dirección: hacia la Kaaba, la primera casa de Dios.
La oración marca el ritmo del día, elevando el pensamiento a Dios: se reza al alba, al mediodía, a media tarde, al ponerse el sol y antes de media noche.
Antes de la hora de la oración el muecín llama a la oración desde lo alto del minarete, aunque hoy ha sido sustituido por altavoces y grabaciones. La llamada a la oración dice: "Suma es la grandeza de Dios. Doy fe de que no hay más Dios que Dios. Doy fe de que Mahoma es el profeta de Dios. ¡Venid a la oración! ¡Venid a la salvación! La oración es mejor que el sueño. Suma es la grandeza de Dios. No hay más Dios que Dios".
A partir de la llamada del muecín, los musulmanes comienzan las abluciones que preceden a la oración, se colocan en filas y bajo la guía del imán, recitan versos del Corán y haciendo inclinaciones rituales. Luego se ponen de rodillas con la frente apoyada en el suelo en señal de sumisión a Dios, este ritual puede repetirse hasta cuatro veces ( ver dibujos con las palabras que acompañan a cada gesto).




Alá es grande.
Me dirijo a aquel que ha hecho el cielo y la tierra.
Santo es mi Señor
Alá es grande. Santo es mi Señor.Mi Creador y Salvador
¡Oh, Alá! Perdona mis pecados. Miéstrate propicio. Condúceme por el buen camino. Guárdame de todo mal
¡Que la paz y la gracia de Alá estén con vosotros!



La pueden realizar en cualquier parte, sólos o acompañados, pero la oración comunitaria tiene más valor que la que se hace en solitario. El viernes, día festivo para los musulmanes, es obligatorio acudir por la mañana a la mezquita para hacer la oración en común,que irá acompañada de un sermón del imam; los demás días sólo es recomendable.





Ayuno (savn) 


Durante el mes del Ramadán, noveno mes del año islámico, el musulmán debe abstenerse de comer, beber, fumar, perfumarse y tener relaciones sexuales desde el alba hasta el anochecer. El ayuno se rompe todas las tardes con un dátil, un pellizco de sal y un sorbo de agua. Por la noche se levantan estas prohibiciones. La cena de ruptura del ayuno es un signo de fraternidad.
Durante este mes cambia el ritmo de vida, y se dedica más tiempo a la reflexión, relaciones humanas, solidaridad, celebraciones.
El ayuno comienza con una fiesta de preparación, la "noche del perdón", en la que los musulmanes olvidan las ofensas mutuas y se reconcilian. Hacia el final del mes celebran la "noche del poder", en la que conmemoran la revelación del Corán y el inicio de la misión del profeta Mahoma. Pero la que más destaca es la fiesta del final del ayuno, que todos celebran llenos de alegría, vistiendo sus mejores trajes, preparando exquisitos manjares, adornando las casas y las calles, visitando a los amigos, haciéndose regalos.




La limosna (zekat)
Impuesto religioso sobre las riquezas.El Corán considera un deber fundamental compartir los bienes propios con los pobres y necesitados, pues ellos también son hijos de Dios y miembros de la comunidad. La ley islámica fija una cantidad según el tipo y categoría de bienes, pero en la práctica se ha simplificado, dando entre un dos y un tres por ciento del patrimonio total de cada persona. En la actualidad, el azaque, como también es conocida, se paga junto con los demás impuestos de los países musulmanes tradicionales. Sin embargo subsiste una obligación moral de limosna voluntaria.
No obstante se insiste en la actitud interior del que da y del que recibe, pues es más importante la calidad que la cantidad de la limosna; es decir, se debe dar con amor y discreción, sin ostentaciones que humillan al que recibe; éste debe emplear debidamente la limosna y servir a la comunidad según sus posibilidades.

Peregrinación (hadj)
Ir a La Meca al menos una vez en la vida, si los medios y las fuerzas lo permiten. La mujer también está obligada, pero necesita el permiso del marido o protector y además tiene que ser acompañada por uno de ellos. Se puede llevar a cabo de dos formas: como umra (visita), en cualquier época del año; o como hadj, que debe realizarse durante el mes Dhul al-Hijja.

La peregrinación a La Meca, como hadj, es un acontecimiento importante para todo creyente musulmán, que tiene lugar el último mes del año islámico y que congrega a más de un millón de musulmanes. Los peregrinos afluyen de distintas partes, vistiendo una chilaba blanca que consta de dos piezas, que simboliza la actitud de purificación y suprime toda diferencia de raza y condición social. Se realiza entre los días 7 y 13 del último mes del calendario árabe llamado Dhul al-Hijja. Unifica a todos los musulmanes del mundo y simboliza el retorno a sus orígenes. Peregrinan para purificarse y quedar limpios de pecado, como al nacer. Se distinguen los siguientes actos:
1. El peregrino acostumbra a inclinarse en Medina ante la tumba del profeta (esto no obligatorio pero sí muy frecuente). Antes de entrar en La Meca los peregrinos:
- Se cambian sus vestiduras de viaje por dos trozos de tela blanca, unidos sin costura llamadas ihrams.
- Se purifican con frecuentes abluciones.
- Repiten una y otra vez: "Heme aquí, oh Alá".
2. El acto central de la peregrinación a es el tawaf y consiste en dar siete vueltas a la Kaaba, en sentido contrario a las agujas del reloj saludando los "ángulos" del edificio cúbico. En un ángulo se encuentra la Piedra Negra, cubierta con ricas telas caligrafiadas en oro. Se dice que es negra por los pecados del mundo. La mayoría trata de tocar o besar la piedra negra, pero si hay mucha gente es suficiente con levantar el brazo derecho y mantenerlo erguido. Los hombrees dan las tres primeras vueltas al trote, y las cuatro útimas al paso. Tras cada vuelta se formulan declaraciones rituales de fe y se rezan plegarias. Las mujeres han de caminar lentamente a lo largo de las siete vueltas. No se conocen los orígenes de la Kaaba, dice la tradición que existe desde los comienzos del mundo.
3. El sa'y, consiste recorrer siete veces la distancia que hay entre las colinas de Safa y Marwa, como hizo Agar, esposa y esclava de Abrahán antes de beber el agua que le salvó la vida a ella y a su hijo Ismael (padre del pueblo árabe). Pueden tardar unas 7 horas hacer este itinerario. Entre las dos colinas hay 394 metros. Han de acercarse después al pozo de Zemzem, donde el ángel se dirigió a Agar y a Ismael, para beber de su agua en recuerdo de ese encuentro.
4. El noveno día del dhul al-Hijja los peregrinos visitan al monte Arafat, que enrealidad es una llanura a 19 Kms de La Meca. Allí los peregrinos están de pie en oración ante el sol, significando que están cara a cara con Dios y piden el perdón por sus pecados. Después, se efectúa una marcha hacia Muzadifa, donde los peregrinos pasan la noche al raso.
5. Por la mañana del décimo día recogen 49 guijarros y visitan el pueblo de Mina (entre Arafat y La Meca). Arrojan las piedras contra las tres columnas que simboliza Satán, es la lapidación. Se recuerda el gesto que tuvo Abrahán de no sacrificar a su hijo, y "apedrear" al demonio que le sugería que no hiciese caso a Dios. Este acto simboliza la lucha del creyente contra el mal.
6. La peregrinación termina en Mina con el sacrificio de un animal (cordero, cabra…) en recuerdo del cordero que sacrificó Abrahán, en lugar de su hijo, y celebran un banquete. Musulmanes de todo el mundo se unen espiritualmente con quienes está celebrando el final de su peregrinación a través de la fiesta del cordero.






El Corán


El Corán , también transliterado como AlcoránQurán o Korán, es el libro sagrado delislam, que para los musulmanes contiene la palabra de Dios , revelada a Mahoma  quien se considera que recibió estas revelaciones por medio del ángel Gabriel .
Durante la vida del profeta Mahoma, las "revelaciones" eran transmitidas oralmente o escritas en hojas de palmeras, trozos de cuero o huesos, etc. A la muerte del profeta, en 632, sus seguidores comenzaron a reunir estas "revelaciones", que durante el Califato de Utman ibn Affan  tomaron la forma que hoy conocemos, 114 capítulos (azoras, سورة), cada uno dividido en versículos .
El Corán toma muchos personajes que aparecen en los libros sagrados del judaísmo y el cristianismo (Torá y Biblia) y en la literatura devota (por ejemplo, los libros apócrifos), con muchas diferencias en detalle. Personajes del mundo hebreo y cristiano muy conocidos como AdánNoéAbrahamMoisésJesús de Nazaret y Juan Bautista aparecen mencionados como profetas islámicos.
Los musulmanes dicen del Corán que es la palabra "eterna e increada" de Alá; por ello su transmisión debería realizarse sin el menor cambio en la lengua originaria, el árabe clásico, lengua en consecuencia considerada sagrada a todos los efectos. El Corán ha sido traducido a muchos idiomas, principalmente pensando en aquellos creyentes cuyas lenguas no son árabes. Aun así en la liturgia se utiliza exclusivamente el árabe, ya que la traducción únicamente tiene valor didáctico, como glosa o instrumento para ayudar a entender el texto original. De hecho, una traducción del Corán ni siquiera se considera un Corán auténtico.

Historia


El origen del Corán ha generado mucha controversia porque los especialistas islámicos parten de la presunción que el Corán es un texto incorrupto y divino, mientras que los especialistas laicos lo ven como un texto humano semejante a cualquier otro. Tales divergencias hacen que sea necesario conocer ambas versiones de la historia. El Corán reta a los lectores a que encuentren alguna contradicción o divergencias en él y les enfatiza que no la encontrarán, puesto que al suponerse de origen divino no debería haber contradicciones en él.

[editar]El Corán como "doctrina eterna"

Las variedades más extendidas de la teología musulmana consideran que el Corán es eterno y que no fue creado. Tomando en cuenta que los musulmanes creen que figuras bíblicas tales como Moisés y Jesús predicaron el islam, la doctrina de la revelación inmutable y no creada implica que los tres textos más antiguos la Torála Biblia y el Corán se deben a que los primeros fueron objeto de la degeneración humana.
No obstante, algunos movimientos liberales del islam, y particularmente las sectas mu'tazili e ismailí, implícita o explícitamente cuestionan la doctrina de un Corán no creado cuando realizan ciertas preguntas relacionadas a la aplicación de la ley islámica. Algunos pensadores contemporáneos, como Reza Arslan o Nasr Hamid Abu Zayd, han argüido que tales leyes fueron creadas por Dios para solucionar las necesidades particulares de la comunidad de Mahoma. Otros rebaten que tales leyes no difieren en nada de la ley mosaica.
Entre las razones ofrecidas por la crítica de la doctrina del "Corán eterno" se encuentra su implicación en el tawhid, o "la unidad de Dios". El pensamiento de que el Corán es la palabra eterna y no creada de Dios y que siempre ha existido junto a Él podría llevar a pensar en un concepto plural de la naturaleza de Dios. Preocupados de que esta interpretación parezca hacerse eco del concepto cristiano de la "Palabra eterna de Yahweh" (Logos), algunos musulmanes, y particularmente los mu'tazilíes rechazaron la noción de la eternidad del Corán. Sin embargo, la mayoría de los musulmanes actuales opinan que esta visión de los mu'tazilíes es producto de la no comprensión profunda de la naturaleza misma del Corán y de su relación con el tawhid.

[editar]Según especialistas islámicos

Según la tradición, Mahoma no podía leer ni escribir sino que, simplemente, recitó lo que le era revelado para que sus compañeros lo escribieran y memorizaran. Algunos exégetas creen que esta tradición de que Mahoma no podía leer ni escribir está en contradicción con el texto coránico mismo por doble partida: primero el Corán anuncia que el profeta "no solía leer ni escribir" es decir no era dado a la lectura o la escritura, esto, según ellos, no quiere decir que no supiera hacerlo, pero existe otra aleya susceptible de ser interpretada como indicio de que sabía leer, la número dos de la azora "La Congregación": "Fue Él (Alá) quien levantó de entre los iletrados un Apóstol de entre ellos mismos, recitando Sus Señales, purificándoles y enseñándoles el Libro y la sabiduría..." Los simpatizantes del Islam tienen por verdad que la redacción del texto coránico existente hoy corresponde puntualmente a lo que fue revelado al profeta Mahoma, es decir, las palabras textuales de Alá entregadas a Mahoma por medio del arcángel Gabriel.
Los acompañantes de Mahoma, según las tradiciones musulmanas, empezaron a registrar las azoras de forma escrita antes de que su líder muriera en el año 632. Esta práctica de escribir las "revelaciones" a medida que le llegaban al profeta era una libertad que todos los testigos de los momentos en que ocurrían las revelaciones podían tomarse, aunque se trataba de una reabundancia literaria ya que el Corán fue compilado bajo los auspicios del profeta mismo. Basta decir que entre todos los coranes que existen hoy y han existido no hay ninguna diferencia. Existe solo una versión del Sagrado Coran, las copias de varias azoras escritas durante su vida se citan con frecuencia en las tradiciones. Por ejemplo, en la historia de la conversión de Umar ibn al-Jattab (momento en que Mahoma todavía estaba en La Meca), se dice que su hermana estaba leyendo un texto de la azora Ta-Ha. En Medina, se dice que alrededor de sesenta y cinco acompañantes actuaron como escribas para él en algún momento o en otro. El profeta los llamaba para que escribieran las "revelaciones" justo después de tenerlas.
Una tradición documenta que la primera recopilación completa del Corán fue hecha durante el mandato del primer califa, Abu Bakr as-Siddiq. Zayd ibn Thabit, que había sido uno de los secretarios de Mahoma, “reuniendo el Corán a partir de varias piezas de hueso y de los pechos (es decir, ‘los recuerdos’) de los hombres”. Esta recopilación fue conservada por Hafsa bint Umar, hija del segundo califa Umar y una de las viudas de Mahoma.
Durante el califato de Utman ibn Affan, hubo disputas relativas a la recitación del Corán. En respuesta, Utman decidió codificar, estandarizar y transcribir el texto. Se dice que Utman comisionó a un comité (que incluía a Zayd y varios miembros prominentes de Quraysh) para poder producir una copia estándar del texto.
Según algunas fuentes, esta recopilación se basó en el texto conservado por Hafsa. Otras versiones indican que Utman hizo esta recopilación de manera independiente y que el texto de Hafsa habría sido llevado adelante y que, al final, se encontró que los dos textos coincidían perfectamente. Sin embargo, otros documentos omiten por completo referencias a Hafsa.
Los eruditos musulmanes afirman que si el califa hubiera ordenado la recopilación del Corán, este nunca habría sido relegado al cuidado de una de las viudas del profeta. Posiblemente la historia haya sido inventada para aproximar en el tiempo la muerte del profeta y la recopilación del texto.
Cuando terminó el proceso de recopilación, entre los años 650 y 656, Utman envió copias del texto final a todos los rincones del imperio islámico y ordenó la destrucción de todas las copias que difirieran de la nueva versión.
Varios de los manuscritos, incluyendo el manuscrito de Samarkanda, son reivindicados como copias originales de las enviadas por Utman; no obstante, muchos especialistas, occidentales e islámicos, dudan que sobreviva algún manuscrito utmánico original.
En lo que respecta a las copias que fueron destruidas, las tradiciones islámicas aseguran que Abdallah Ibn Masud, Ubay Ibn Ka'b y Alí, primo y yerno de Mahoma, habían preservado algunas versiones que diferían en algunos aspectos del texto utmánico que es considerado ahora por todos los musulmanes. Los especialistas musulmanes registran determinadas diferencias entre las versiones, las cuales consisten casi totalmente en variantes léxicas y ortográficas o diferentes conteos de versos. Se ha registrado que los tres (Ibn Masud, Ubay Ibn Ka'b y Alí) aceptaron el texto utmánico como la autoridad definitiva.
La versión de Utman se compuso según un viejo estilo de escritura árabe que dejaba por fuera casi todas las marcas vocálicas, por esta razón la escritura se puede interpretar y leer de varias formas. Este escrito utmánico básico se ha llamado rasma y, con algunas diferencias menores, es la base de varias tradiciones orales de recitación. Para fijar estas recitaciones y prevenir cualquier error, los escribanos y eruditos comenzaron a anotar las rasmas utmánicas con varias marcas diacríticas —puntos y demás— para indicar la forma en que las palabras debían ser pronunciadas. Se cree que este proceso de anotación comenzó alrededor del año 700, poco tiempo después de la compilación de Utman, y que terminó aproximadamente en el año 900. El texto del Corán más usado en la actualidad está basado en la tradición de recitación de los Hafs, tal y como fue aprobado por la Universidad Al-Azhar de El Cairo, en 1922, (para más información relacionada con las tradiciones de recitación, refiérase a Recitación coránica, más adelante en este mismo artículo).

[editar]Según especialistas seglares

Aunque algunos eruditos concuerdan con varios de los aspectos señalados por las tradiciones islámicas relativas al Corán y sus orígenes, especialistas escépticos aseguran que Mahoma mismo compuso los versos y las leyes que integran el texto y que se las atribuyó a Alá para darles legitimidad; agregan que sus seguidores memorizaron y escribieron sus revelaciones y que numerosas versiones de estas revelaciones circularon después de su muerte en el año 632; aseguran asimismo que Utman ordenó la recopilación y el ordenamiento de esta masa de material entre 650 y 656, lo cual también es descrito por los eruditos islámicos. Los eruditos occidentales señalan muchas características del Corán (sus repeticiones, su ordenamiento, la mezcla de estilos y géneros) como signos de un muy humano proceso de recopilación que nada tiene que ver con supuestos "métodos divinos".
Estos eruditos explican las numerosas similitudes entre el Corán y las escrituras hebreas argumentando que Mahoma les enseñaba a sus seguidores lo que él pensaba que era historia universal, tal y como lo había escuchado de las bocas de judíos y cristianos que había encontrado en Arabia y durante sus viajes. Ciertos eruditos seglares también debaten la creencia islámica de que todo el Corán fue enviado por Alá a la humanidad. En este sentido, notan que en numerosos pasajes Alá es aludido directamente en tercera persona, o bien, cuando la voz narrativa jura por varios entes, incluyendo a Alá. Otros especialistas tienden a no atribuirle el Corán entero a Mahoma, arguyendo que no hay una verdadera prueba de que el texto haya sido compilado bajo el mandato de Utman, puesto que las más viejas copias conservadas del Corán completo datan de varios siglos después de Utman (la más vieja copia existente del texto completo es del siglo IX). Alegan que el Islam se formó lentamente, durante los siglos transcurridos tras las conquistas musulmanes y en la medida en que los conquistadores islámicos iban elaborando sus propias creencias en respuesta de los desafíos judíos y cristianos. Una propuesta influyente en este punto de vista fue la del Dr. John Wansbrough, un académico inglés. Sin embargo, los escritos de Wansbrough estaban redactados en un estilo denso, complejo y casi hermético y ha tenido una gran influencia en los estudios islámicos a través de sus estudiantes, Michael Cook y Patricia Crone y no tanto por sus propios escritos. En 1977, Crone y Cook publicaron un libro llamado Hagarism, en el que se sostiene que:
"Básicamente, el Corán carece de una estructura central, frecuentemente es oscuro e inconsecuente tanto en lengua como en contenido; es superficial en su concatenación de materiales dispersos y muy dado a la repetición de pasajes enteros en versiones que presentan variantes. Partiendo de todo esto, se puede argumentar plausiblemente que el libro es el producto de la edición imperfecta y morosa de materiales provenientes de una pluralidad de tradiciones". (Patricia Crone y Michael Cook, Hagarism: The Making of the Islamic World, Cambridge, 1977, p. 18). (Traducción de Sergio Arroyo Molina).
Este libro fue extremadamente controvertido en su tiempo, pues desafiaba no solo la ortodoxia musulmana, sino las actitudes prevalecientes entre los mismos islamistas seglares. Wansbrough fue criticado por su interpretación del Corán y por la "mala" interpretación de las palabras originales en árabe. Crone y Cook se han desdicho de algunos de sus argumentos en el sentido de que el Corán evolucionó a lo largo de varios siglos, pero todavía sostienen que la tradición de lectura sunita es muy poco fiable, pues proyecta su ortodoxia contemporánea en el pasado —del mismo modo que si los exégetas del Nuevo Testamento quisieran comprobar que Jesús era católico o metodista.
Fred Donner ha argüido contra Crone y Cook, en lo relativo a la temprana fecha de la recopilación del Corán, basado en sus lecturas del propio texto. Él argumenta que si el Corán hubiera sido recopilado a lo largo de los tumultuosos siglos iniciales del Islam (con sus vastas conquistas, expansión y los sangrientos incidentes entre los rivales del califato) habría habido evidencia de esta historia en el texto. No obstante, según el no hay nada en el Corán que no refleje las cosas conocidas de la temprana comunidad musulmana.
Algunos aseguran que los hallazgos arqueológicos de 1972 pueden arrojar luz acerca de los orígenes del Corán. En ese año, durante la restauración del Gran Mezquita de San'a, en Yemen, los obreros se toparon con un "cementerio de papeles" que contenía decenas de millares de papeles en que se leían fragmentos del Corán (los ejemplares del Corán todavía son desechados de esta manera, pues se considera impiedad tratar el "texto sagrado" como si fuera basura ordinaria). Se creyó que algunos de esos fragmentos eran los textos coránicos más antiguos que se han encontrado. El especialista europeo Gerd R. Puin ha estudiado estos fragmentos y ha publicado no solamente un corpus de textos, sino también algunos descubrimientos preliminares. Las variantes de los textos descubiertos parecen coincidir con ciertas variantes menores reportadas por algunos eruditos islámicos en sus descripciones de las variantes del Corán, que una vez estuvieron en posesión de Abdallah Ibn Masud, Ubay Ibn Ka'b y Alí, y que fueron suprimidas por órdenes de Utman.